Ya se habían llevado a Estela y no podían hacer nada más. Roxana solo pudo regresar a la mansión con Andrés y Bautista. Los tres iban a ayudarle con el almuerzo, pero, al final, ella tuvo que hacerlo sola. Después de preparar el almuerzo con sentimientos encontrados, Roxana se dirigió a la sala para llamar a Andrés y Bautista para comer. Sin embargo, no recibió respuesta después de llamarlos dos veces. Roxana se acercó a ellos con confusión y los vio sentados en la alfombra, distraídos y sin haber tocado el modelo de Lego frente a ellos.
―¿En qué piensan?
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