Capítulo 647 Abstenerse de correr la voz

Todos oyeron a Yesenia alto y claro. Por supuesto, no sabían mucho del área médica, así que asintieron ante sus comentarios. Al fin y al cabo, tenían la percepción de que los médicos exitosos, por lo regular, tenían alrededor de cincuenta años; por lo tanto, no podían ver a Roxana, una mujer joven y hermosa, como una experta del sector médico. La mano de Yesenia se acercó cada vez más al rostro de Roxana, quién puso una expresión fría, como si estuviera lista para apartar su mano en cualquier instante. Sin embargo, antes de que pudiera hacerlo, una enorme mano atacó primero y dejó la mano de Yesenia inmóvil. El hombre sostenía su mano con tanta fuerza que ella perdió el equilibrio, se tambaleó hacia atrás y no le dio en la cara a Roxana.