—Sr. Hughes, preste atención.
Megan terminó su comida engullendo un bocado de sopa cuando Jacinta se detuvo frente a su mesa. Se limpió la boca con un pañuelo de papel, sintiéndose satisfecha. Pierce no pensaba prestarle atención a Jacinta mientras se giraba para mirar a Megan y luego a su propio bol de fideos con carne. No pudo evitar reírse.
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