—¡El Sr. Norton no le hizo esas cosas a la Sra. Norton! Fue... fue... —tartamudeó Noah, con la voz entrecortada mientras miraba la expresión de furia desenfrenada de Benedict. Pensó si debía revelar la verdad.
Evelyn estaba atrapada. Con las maniobras de Finnick, acabaría descubriendo la verdad tarde o temprano. Lo más importante era que Noah era incapaz de soportar el peso de su conciencia acusadora. Cualquier encuentro con Vivian hacía que sintiera que el corazón se le iba a salir del pecho por la culpa.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread