—¿Qué estás mirando? —Finnick se dio la vuelta y rodó por encima de ella en un rápido movimiento, mirándola. Llevaba un buen rato despierto y había sentido su mirada penetrante.
Aunque sabía que la delicada mujer que abrazaba se había sentido agraviada en parte por su culpa, se alegraba de estar en esa posición con ella una vez más. Las dificultades forman parte de la vida. Era inevitable.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread