Capítulo 1676 Él nunca me abandonará

Nunca había esperado que Larry grabara el jade por su cuenta en la oscuridad de la noche. Ahora su nombre, «Joan», había sido inscrito de forma especial e ingeniosa en el costoso jade. La torcida y antiestética inscripción no se parecía en nada a la elegante letra de Larry. Él debió de esforzarse al máximo para controlar la herramienta, pero ¿cómo se podía comparar la escritura con una pluma y un buril? Así fue como surgió ese jade único en su género. Mientras su dedo acariciaba la superficie irregular del grabado, millones de imágenes vívidas de Larry pasaron por su mente. Aparte de los recuerdos felices de él, recordó su rostro enfurecido y las veces que se habían peleado. La última imagen que recordó fue la de Larry sentado en su escritorio, sosteniendo un cincel mientras miraba por la ventana el cielo nocturno, con la frente empapada de sudor. El hombre nunca le había mostrado el jade grabado, pero al final, de alguna manera, acabó en las manos de Leslie y de ella.