¿Quién iba a pensar que el Sr. Hughes, uno de los mejores directores de la industria del entretenimiento, elegiría almorzar en un restaurante tan ordinario? Sin embargo, Megan se dio cuenta de que tenía una idea equivocada tras poner un pie en el restaurante. Parecía que todo el mundo en la industria del entretenimiento sabía que este es el lugar habitual de Pierce para comer. Esto se debe a que todos los comensales llevaban una máscara y una gorra. Megan se dio cuenta de que una mujer, que comía fideos con la máscara puesta, era una de las cuatro estrellas femeninas en ascenso del sector. Se quedó mirando la figura de Pierce con impotencia, pero se dio cuenta de que él le devolvía la mirada con sarcasmo. Levantó la ceja sorprendida. Pierce parecía estar ya acostumbrado. Debía de ser la norma para él estar rodeado de gente como una de las principales figuras del mundo del espectáculo.
—Dos tazones de fideos con carne, por favor.
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