Más tarde ese día, después de que Abraham bajara las escaleras, Alexandra pidió un reordenamiento para la unidad de Juan.
—Señor Pánuco, Sebastián y yo lo hemos hablado, y haremos lo posible por estar con el niño lo más a menudo posible. Entonces, ¿crees que será una buena idea dejar que Juan tenga una unidad propia? Así no tendrá que seguir molestándolos.
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