—¿Es una especie de cueva de hielo o algo así? ¿Por qué hace tanto frío? —Edmundo no pudo evitar refunfuñar mientras temblaba también.
Los dos se abrieron paso por la cueva con bastante rapidez con la ayuda de la linterna. Descubrieron que, a diferencia de las dos últimas cuevas, este túnel en particular era mucho más pequeño. De hecho, podían tocar ambos lados de las paredes del túnel con solo estirar los brazos.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread