Tan pronto como Elisa se fue, Marina regresó. Marina vio con claridad la figura de Elisa mientras se alejaba en su auto. Antes de esto, Guillermo le había dicho a Marina que tenía que ocuparse de un asunto importante en la empresa hoy. Al fin entendió la verdadera razón. No podía detener a Elisa, solo podía enfrentar a Guillermo. Fue directa, y su tono era hostil.
—¿Me pediste que fuera a ocuparme de los asuntos de la empresa hoy porque Elisa venía?
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread