Capítulo 874 No pueden discutir todo el tiempo

Al día siguiente, Elisa iba de camino al trabajo, como cada día. No obstante, ese día habían divulgado rumores maliciosos en la oficina. Tomás intervino y detuvo la divulgación, por lo que nadie volvió a rumorear de manera pública, pero continuaban intercambiando miradas extrañas entre ellos. En especial cuando vieron a Elisa, la miraron con desprecio. La mujer no entendía por qué y no le dio importancia, ya que tenía que enfrentar la situación. En cualquier caso, la atacaban de manera inesperada en su lugar de trabajo. Tenía que atender varios asuntos y tenía mucho trabajo por hacer; mientras que Gabriel la apoyara, no le importaba nada más. Ella había tomado represalias y había anunciado que, si el gran señor Weller no estaba de acuerdo, dejaría la colaboración, pero la realidad era que, si él cancelaba el contrato, ella perdería todo su esfuerzo y trabajo constante que había hecho por el proyecto. Aunque podía continuarlo con Grupo Fu, podría ser un poco engorroso.