Capítulo 843 Estrangularla

Gabriel abrió la puerta enseguida, pero Elisa no estaba por ninguna parte, por lo que su rostro se ensombreció de inmediato. Después de revisar todas las habitaciones, llegó a la conclusión de que la joven ya no estaba en la casa. «Se escapó por el segundo piso. ¡Maldita sea!». En la frente de Gabriel se visualizaba una vena que palpitaba fuerte. Las acciones de Elisa eran totalmente imprevisibles, por lo que se enfadó aún más. Ella no dejó una nota, lo que demostraba cuánto odiaba su presencia. Su forma de actuar, le indicaba que no lo necesitaba en su vida. En ese momento, sintió el impulso de estrangularla; no obstante, llamó a Tomás. En cuanto se conectó la llamada, el asistente oyó la voz amenazadora de Gabriel. —Averigua dónde está Elisa.