Capítulo 1678 ¡Levántate!

Siempre había sido perfecto para ella, como si fueran almas gemelas. Pero tenía que enfrentar la verdad, por difícil que fuera. Bella reprimió el abrumador temor y confusión. No mostró inseguridad mientras se levantaba de la cama y se dirigía a la otra habitación. Elisa miró a Gabriel, indicándole que llevara a César junto con ellos. Gabriel levantó una ceja, desconcertado por su comportamiento. Ella debía pensar en él como un guardaespaldas ahora, ella era la única persona que se atrevería a darle órdenes. A pesar de lo desconcertado que se sentía por la situación, siguió sus órdenes. Ella no tenía por qué estar envuelta en esta situación en primer lugar. Después de todo, era un asunto de su familia. Sin embargo, no tenía tolerancia hacia César. Lo miró fijo mientras exigía: