Ella no pudo evitar sentir que su frustración aumentaba. «¿De verdad está tan ocupado? No le tomaría más de un minuto responder mi mensaje, pero ya casi a pasado una hora». Ariadna se preguntó qué lo mantenía tan ocupado que solo podía volver a casa tarde en la noche y debía irse temprano por la mañana. Además, estaba tan cansado que se quedaba dormido apenas se acostaba.
Ariadna respiró profundo al sentir que su disgusto y dudas aumentaban. Quiso llamar a Valentín, pero, después de dudarlo por unos minutos, decidió llamar a Ramiro. Sin embargo, cambió de opinión tan pronto como hizo la llamada y cortó al instante.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread