Ariadna no pudo evitar mirar para ver quien hablaba; para su sorpresa era Violeta, pero sonaba diferente a lo usual.
—Todavía puedo sentir la piel de gallina en el brazo. Nunca me imaginé que Violeta fuera falsa —dijo Heber con desagrado, sacudiendo el brazo.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread