Desde luego que Celeste quería que se pusiera del lado de la reina madre. «Por muy malvada que haya sido al obligarme a casarme con un hombre enamorado de otra mujer, estoy segura de que la reina madre no estaba contenta con ella, o no habría hecho que Diego se casara conmigo ni lo hubiera drogado para que se acostara conmigo». No se atrevía a permitir que Arón se pusiera del lado de Diego, ya que, si obtenía el poder, podría llevar de vuelta al país a la mujer y legitimarla como su esposa. «¿Y si tiene otro hijo con ella?». En ese caso, dejaría de lado a su hijo. Ser el príncipe no garantizaba el derecho al trono; así que ella sentía la necesidad de planear el futuro de su hijo.
—Aunque tu padre ha sido bueno contigo, Arón —dijo Celeste en voz baja con los ojos fijos en él— deseo que tomes el lado de tu abuela.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread