Capítulo 1010 Eres mía

«Como no hicieron una boda, me preocupaba que su matrimonio no durara. A juzgar por cómo lucen ahora, parece que estaba equivocada. Está claro que están pasando por las típicas peleas de un matrimonio y que pronto lo solucionarán. Tal vez debería visitar a mi marido al extranjero durante unos días para darles algo de intimidad». Con eso en mente, complacida, Amelia compró los boletos y partió esa misma noche. Mientras tanto, Yeimi por fin llegó a la Universidad de Distrito Jade que, de noche, el lugar se veía muy sereno y precioso. En poco tiempo estaba frente al dormitorio de Donato y llamó a la puerta. ¡Toc, toc, toc! El olor a alcohol inundó sus sentidos en el momento en que la puerta se abrió.