Yeimi no estaba segura por qué Valentín apareció en el momento adecuado. «¿Por qué todavía sigue ayudando a Ariadna cuando ya la han echado de su casa? Nuestro plan hubiera funcionado si se hubiera demorado media hora. Después de todo, él nunca estaría con una mujer que hubiese estado con otro hombre. Es una gran pena, ya que el plan estuvo a punto de ser exitoso». Una mezcla de emociones se apoderaba de Yeimi.
Ignorándola, Ariadna se giró hacia Donato. Como Ramiro le había echado agua, el perfume era mucho menos fuerte que antes. Por ello, suspiró con alivio, ya que no necesitaba preocuparse de que el aroma afectara a los guardaespaldas.
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