Capítulo 1601 Te mataré en diez movimientos

Quentin miró con frialdad a César. Este último sintió al instante como si su corazón le estuviera lanzando una advertencia. Sentía como si fuera una presa que miraba a un depredador desde lejos. Todo su cuerpo se tensó mientras mantenía contacto visual con Quentin, asustado. Durante su larga carrera, César había matado a mucha gente y había visto a muchos guerreros temibles. No obstante, esta era la primera vez que veía a una persona tan brutal y cruel como el hombre frente a él. Miró al hombre y un nombre familiar apareció en su mente de repente. Sus ojos se abrieron por la impresión mientras exclamaba: