En el salón principal, el padre del niñito regordete sostenía un tazón y trataba de hacer que su hijo comiera un poco más.
—Si quieres crecer para verte tan bien como esos soldados, debes comerte toda la comida. ¿Sabías que esos soldados son tan valientes, fuertes y buenos luchadores que nadie puede ponerles un dedo encima…?
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread