Capítulo 940 Haz que se arrodillen

Eran las diez de la noche. Josué estaba arrodillado en el suelo en el pasillo de la entrada de la unidad de cuidados intensivos del Hospital Central de Ciudad Fortaleza. Unos cuantos miembros de las fuerzas especiales policiacas hacían guardia cerca. En la unidad de cuidados intensivos se encontraban varios policías heridos de gravedad, que seguían en estado crítico. Mientras, un grupo de familiares de los policías rodeó a Josué, que estaba arrodillado en el suelo y lo reprendieron en un ataque de furia. Algunos miembros de la familia incluso se pusieron tan nerviosos que lo abofetearon o patearon de vez en cuando. Por supuesto, los miembros de las Fuerzas Especiales Policiacas que estaban alrededor hicieron como si no lo vieran. Tenían una opinión en extremo negativa de Josué, que consentía que sus subordinados atacaran a la policía.