Capítulo 714 Las sospechas del público

Las palabras de Sonia tenían sentido para el público ya que era cierto que Yésica había hecho declaraciones sin aportar ninguna prueba. Nadie sabía si lo que dijo era verdad o no, después de todo, lo único que les había aportado eran palabras. En tanto no había aportado ninguna prueba, eso significaba que nadie podía determinar la veracidad de sus declaraciones. Si no se podía demostrar la verdad, ¿por qué Yésica seguía insistiendo en que Sonia había hecho algo malo? La multitud no se había dado cuenta de lo que sucedía; no obstante, después de que escucharon lo que Sonia dijo, se percataron de que había algo de verdad en ello. Parecía que lo único que hacía Yésica era hablar para lavarles el cerebro y hacerles creer que su hermana había hecho algo malo. Luego, hizo que el público la señalara con el dedo, así todos la catalogaban como la hija ilegítima y la hermana malvada que la acosaba. Cuando el público se percató de ello, también se dio cuenta de que ya no sabían quién era la malvada de esa situación; incluso si Sonia en verdad había hecho algo malo, ellos se dieron cuenta de que Yésica tampoco era una santa. Ante esa idea, muchos de los periodistas y el público se voltearon para mirar a Yésica, asombrados. Uno de los periodistas rompió el silencio: