Capítulo 1011 La preocupación de Sonia

Después de todo, Carlos era un amigo y una figura de hermano para ella. En segundo lugar, él había ido en esa oportunidad a ayudarla, por lo que era inapropiado que Tobías lo tratara así. Por supuesto, ella también estaba equivocada. Sabía que su amado era un novio cruel y celoso, pero nunca se le ocurrió contarle que había salido a comer con Carlos para que no actuara así. Tal vez Tobías le había dicho eso al hombre porque se puso celoso al enterarse por casualidad de que habían salido juntos a almorzar. «Puf, tengo que aprender la lección y tener más cuidado en el futuro. Por último, tengo que decirle a donde sea que vaya para que no se ponga celoso y actúe de manera desagradable». Al pensar en eso, sacudió la cabeza con impotencia y le envió el mensaje. Por otro lado, Tobías había regresado a Grupo Furtado en ese momento; en cuanto se sentó en su oficina, su teléfono vibró. Cansado, se aflojó un poco la corbata antes de sacarlo del bolsillo. Cuando vio que era un mensaje de texto de Sonia, la mirada de cansancio desapareció y adoptó instantáneamente una mirada más animada; era evidente que ella se había convertido en su fortaleza. Cada vez que la veía a ella o a algo relacionado con ella, se sentía muy contento y enérgico. Curvó los labios y sonrió antes de abrir el mensaje para leer el contenido. No obstante, cuando leyó su mensaje en el que decía que no volviera a decirle eso a Carlos, su sonrisa desapareció. Al final, apretó los labios en una línea recta; era evidente que se puso de mal humor.