Capítulo 616 Arrodillarse

Como sabía que se trataba de un asunto personal que involucraba a la familia Reyes, Sonia no esperaba que Tobías formara parte de eso, ya que quería resolverlo ella misma. Por lo tanto, él respetó sus deseos y estaba dispuesto a esperarla allí, así que le esbozó una sonrisa antes de darse vuelta para caminar con Daniela hacia la sepultura de su padre. Yésica estaba arrodillada allí y, como no tenía paraguas, su cuerpo estaba completamente empapado por la lluvia, lo que le daba un aspecto desastroso, ya que el pelo y la ropa se le pegaban a la piel; por supuesto, la expresión cruel y salvaje la hacía lucir peor. —¡So-nia! —dijo con los dientes apretados cuando la vio caminando hacia ella, entonces realizó un esfuerzo para intentar levantarse.