Capítulo 918 Viajó por aire

María se quedó parada y se despidió de él con la mano mientras lo veía marcharse, solo volvió a entrar cuando ya no vio más el auto. Tobías miró el espejo retrovisor hasta que ya no pudo ver la antigua mansión y luego subió la ventanilla; acto seguido, tomó su teléfono, buscó el contacto de Sonia y la llamó. Mientras tanto, ella estaba esperando que él fuera a Compañía Paradigma; sin embargo, no aparecía por ninguna parte y solo quedaba media hora para las siete; eso la preocupó porque no sabía si solo seguía hablando con la gran señora Furtado o si le había ocurrido algo en el camino. Justo cuando por llamarlo para comprobar si estaba bien, su teléfono, que había dejado sobre su escritorio, sonó de repente. Entonces, se dio vuelta y vio que era él quien llamaba, lo que hizo que sus preocupaciones se disiparan mientras contestaba sonriendo: —¿Hola?