—Quiero que los convenzas para que se vayan del hospital hoy. No quiero que Hojita los vea de nuevo —indicó Tobías, mostrándose impasible.
Mientras Tadeo y su esposa siguieran allí, la situación podría volverse peligrosa. Por ello, Tobías tenía que echarlos de ahí lo antes posible. Timoteo se acomodó los anteojos de nuevo.
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