Los tres terminaron su almuerzo en silencio. Después, Cristina recogió la mesa y Aurora volvió a acostarse en el sofá. A Cristina le dio risa ver a Aurora así, ella parecía muy abatida en ese momento, pues ya había pasado lo mejor de su carrera. Cristina no tenía ni idea de cuánto tiempo iba a permanecer en ese estado; tal vez no iba a mejorar hasta que los problemas terminaran.
Cristina puso los platos en el lavavajillas y luego cambió el canal de la televisión para ver un programa de comedia bastante divertido. Sin embargo, Aurora no sonrió ni siquiera cuando el programa terminó, mientras que Cristina se reía a carcajadas a su lado.
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