Capítulo 1398 Para obtener la primicia

Cristina también le prometió a Patricia que no se enamoraría de nadie de la industria, ya que no le interesaban ni las celebridades ni la propia industria. Tomó una botella de agua y la bebió de un trago antes de acurrucarse en su cama. Estaba segura de que no le gustaba Genaro, ya que la razón por la que permanecía a su lado era porque era fácil de manejar. Exhalando un suspiro, Cristina se recordó a sí misma que a Genaro tampoco le gustaba ella, así que debía dejar de imaginar cosas. Luego, cerró los ojos antes de quedarse dormida. Su sueño no fue tranquilo, por lo que se despertó cansada. Sin embargo, de inmediato se dio una ducha para tener un mejor aspecto antes de ir a comprar el almuerzo. Pensó que los paparazzi se habrían dispersado a la mañana siguiente, pero esos pensamientos resultaron ser ilusiones. Al salir del hotel, pudo verlos todavía de pie al otro lado de la calle con las cámaras listas.