Capítulo 851 Un niño mimado
Lázaro se rio y contestó:
—¡Vaya! ¡Sabias palabras! ¡Sabias palabras! ¿Qué más puedo decir? Me siento como si volviera a esos viejos tiempos en la escuela, donde estoy sentado al lado del alumno favorito del profesor que me hace parecer aún más idiota.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread