La temperatura de Sofía era normal y su presión arterial estaba bien, por lo que el médico dijo que tal vez había estado demasiado agotada estos días. Entonces, Leonardo recordó que se había acercado en medio de la noche anterior y le había dado un susto. «Tal vez no durmió bien el resto de la noche, así que todo esto es culpa mía».
Sofía sí que se sentía cansada, así que cuando volvió a su habitación, se metió en la cama tras un momento de deliberación.
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