Capítulo 1849 Suicidio

Y así, nos quedamos a un lado de Marisol en silencio hasta que la ambulancia llegó y se llevó el cuerpo de Gael.   Mientras observaba a Marisol yéndose con la ambulancia, noté a Norman de reojo. Él estaba parado lejos de la multitud, como si fuera un espíritu solitario. A pesar de la distancia, pude sentir la animosidad que él emanaba y que parecía advertir a todos que mantuvieran su distancia. Aunque estaba lejos de mí, estaba segura de que me estaba mirando. De hecho, me imaginé que ya estaba observando cuando Álvaro se lanzó a salvarme. En lugar de confrontarme al respecto, él solo quería expresar que estaba al tanto de todo lo que yo hacía, como un esposo que no estaba dispuesto a hacer nada al respecto, aunque supiera que su esposa lo estaba engañando. Aunque la traición fue obvia para todos, ambos decidimos mantenernos ajenos a ello. Era evidente que esa había sido su elección.