Capítulo 1748 Le seguiré hasta el purgatorio

Al exponerme de esta forma, podía obligar a Álvaro a revelar sus verdaderas intenciones. No quería que fuera de este modo, pero no podía tolerar que el mundo le diera la espalda tampoco, por lo que no tuve otra opción más que buscar la respuesta así. El silencio se prolongó y Josué perdió la consciencia debido a los efectos abrumadores de la droga. Una brisa fría recorrió el edificio y la atmósfera se tensó.  Norman mantuvo su mirada sobre mí, como un águila mirando a un conejo. Al igual que Álvaro, era bueno en mirar a través de las personas. Podía asegurar que estaba intentando averiguar algo con mi expresión facial. Por fortuna, había aprendido uno que otro truco de la actitud despreocupada de Jonathan, ya que Norman no logró encontrar algo. Como lo esperé, él retiró su mirada, derrotado, después de dos minutos. Cerró sus ojos y se quedó absorto en sus pensamientos.