Capítulo 865 Un buen descanso

Me cambié y me puse el traje de baño para entrar a las aguas termales. La temperatura alta era perfecta para mí y me sentía tan relajada después de estar ahí por un tiempo. Marisol saltó con facilidad a la piscina y nadó hacia a mí, por lo que creo que ya estaba acostumbrada; tal vez había nadado mucho en estos días. Como la piscina no era profunda, se apoyó en mí y estuvo a mi alrededor mientras charlábamos.  Camila hizo que alguien trajera algunos postres y pronto llegaron los terapeutas del spa también. Ella había aprovechado que el chalé era tan grande, y como amaba todo lo relacionado a la belleza, había diseñado un cuarto exclusivo para actividades sobre belleza y spa. Entré y me acosté en la cama, disfrutando la sensación de relajación que recorría todo mi cuerpo. Me quedé dormida con rapidez.