Yang Xiao apretó la mandíbula mientras hablaba. No entendía por qué era él quien se enfadaba todo el tiempo mientras hablaba, cuando sus palabras estaban destinadas a provocar al joven que tenía delante. Alguien que no tuviera ni idea de lo que estaba ocurriendo podría confundir a Yang Xiao como el que estaba sufriendo la discriminación.
—Olvídalo. Sólo eres un idiota. No debería perder el tiempo enfadándome contigo. Sal de aquí ahora mismo.
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