—Maestro, lo siento. No quería hacerle daño. No pude controlarme... —Se disculpó Suzumiya Eigetsu mientras se arrodillaba en el suelo con lágrimas en los ojos. Su voz ahogada estaba llena de culpa.
Ye Fan se alegró al instante. Se acercó y se apresuró a ayudarla a levantarse. Pero en el momento en que la tocó, su aura se transformó de repente en la de Tsukuyomi Tenshin.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread