Capítulo 481 La ira de Adolfo
Después de todo, Felicitas era de la respetable Familia Laborda y parecía inconcebible que no tuviera autoridad dentro de su propia casa, negándose a aceptar la realidad. Justo en ese momento, alguien llamó a la puerta de manera gentil indicando la llegada de Letizia. Con el permiso de Macarena, entró y les informó:
—Señorita Macarena, el Señor Briseño tiene confianza en que Emmanuel será absuelto, ¡con más del noventa por ciento de certeza!
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread