Capítulo 2229 La batalla detrás de los votos

Bajo la dirección de Abel, el alboroto en la sala se fue apagando gradualmente. Los representantes volvieron a sus asientos uno por uno, aunque la tensión aún persistía en el aire. Teo también se sentó, observando cómo todo empezaba a encajar. Tanto él como Macarena conocían su apoyo de base: cada uno tenía asegurados unos 230 votos. Los 50 votos moderados restantes decidirían el ganador. Después del evento anterior, Teo había logrado cambiar la percepción pública lo suficiente. Al poner a la sala en contra de Macarena, la había hecho parecer igualmente competitiva. En una carrera tan reñida como esta, incluso la más mínima ventaja podía inclinar la balanza a su favor. A diferencia de las elecciones modernas, este proceso seguía arraigado en la tradición. No había papeletas electrónicas ni registros digitales; los votos escritos a mano se contaban en el acto.