Capítulo 1708 Sirena Dorada

—No importa el rencor que tengan o lo que necesiten decir, éste no es el lugar para ello. Cualquiera que cause disturbios será fusilado en el acto. Por muy experto que fuera un artista marcial, seguía temiendo un cuchillo; ni siquiera el experto más poderoso podía enfrentarse a una bala. Así pues, el grupo de individuos de aspecto feroz tuvo que dejar de hablar y de moverse, mirando a Jazmín y a su gente, pero sin atreverse a desafiarla.