Capítulo 1894 El Guerrero Lobo resucita
Tras una profunda contemplación, los ojos de Macarena brillaron como la escarcha cuando por fin rompió el silencio. Su voz era grave y mesurada, y cada palabra llevaba el peso del dolor y la determinación que compartían.
—Emmanuel —empezó, con la mirada clavada en la de él—. Ahora que hemos vuelto, no podemos precipitarnos en la venganza. Debemos agacharnos, estabilizar nuestra posición y observar con cuidado el próximo movimiento de Guillermo. Sólo podemos atrapar a la serpiente de un golpe sacándola de su agujero. —Sus labios se curvaron en una fría sonrisa mientras añadía—: Todas y cada una de las personas implicadas en nuestra caída pagarán el precio. Nadie saldrá indemne.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread