Capítulo 1951 No tienes permiso para irte
Eduardo bajó la cabeza para besar la de ella. —Anoche fue genial.
Fue entonces cuando a Julia se le ocurrió algo. En un principio había pensado comprar píldoras del día después, ya que él no había llevado preservativos la noche anterior, pero en ese momento no lo pensó y decidió dejar que la naturaleza siguiera su curso. Ahora que lo había reconocido como el elegido, tener un hijo no haría sino completar su relación.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread