Capítulo 708 Joel me incriminó
El silencio que se suscitó fue uno muy largo. El tiempo pasó de una forma muy borrosa antes de que Karla pudiera recuperar sus sentidos. Aun así, cambió su expresión a una neutral, como si nada hubiese pasado, y llevó con calma a Elizabeth a su casa.
Las dos mujeres se conocían muy bien, por lo que no fue necesario decir nada en el camino de vuelta; sin embargo, Elizabeth no pudo contenerse más cuando bajó del carro. Caminó a la ventana y le habló a Karla con un tono suave.
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