Capítulo 661 Antonio ya tiene una solución

Cuando la puerta del despacho del director se abrió desde dentro, la mirada de Hilda se posó en Antonio, después de unos días sin verlo, tenía un aspecto bastante demacrado y parecía haber perdido mucho peso. Preguntándose qué tipo de penurias había soportado en los últimos días, de repente sintió pena por él, al fin y al cabo, se daba cuenta de que Maira era muy importante para él, de momento no se sorprendió cuando lo vio e incluso Hilda supuso que ya había recibido una llamada de los secuestradores, que era probable que les habían dado instrucciones similares. Cuando asintió para saludarlo, vio a un hombre de pie junto a Antonio y pensó que ya lo había visto en alguna parte.