Capítulo 538 Este hombre está loco

—¡No te dejaré ir hasta que me digas a dónde vas! ¿No habíamos acordado que ibas a ayudarme? —Karla se mordió el labio. Extendió los brazos a lo ancho para bloquear el camino de Elías. Tenía un mal presentimiento. —El acuerdo es inválido ahora. ¡No seré responsable de lo que te ocurra si no te quitas a la cuenta de tres! —Elías le dio a Karla una mirada fría. Ya no tenía la paciencia para hablar con ella. Solo quería una cosa en ese instante: regresar a su país lo antes posible. No dejaría que nadie lo detuviera en ese momento. ¡El acuerdo era una estupidez comparada con la seguridad de Marina!