Marina estaba un poco borracha después del almuerzo. Bebió bastante, aunque había dicho que no lo haría. Como ella no podía entrar en las conversaciones sobre negocios, etc. mientras otros estaban charlando, simplemente se sentó allí sola y recordó los incidentes ocurridos con anterioridad. Se sintió abrumada y comenzó a sumergirse en las bebidas.
Después de unas copas, Marina sintió que su rostro estaba caliente y estaba un poco mareada. Elías sabía que ya estaba borracha. Frunció las cejas un poco y luego preguntó:
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