Capítulo 483 Te odio
Desde que se embarazó, Marina se sentía somnolienta casi todo el tiempo. Por eso, Elías la hizo trabajar en su propia oficina, donde le preparó una cobija de lana y una taza de agua tibia. También colocó un plato de fruta cortada en la mesa de al lado. Ella a menudo se quedaba dormida después de comer la fruta y se despertaba justo a tiempo al final de la jornada laboral y se iba con Elías.
—Hoy volví a darme un pequeño lujo —se quejó Marina con remordimiento mientras caminaba.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread