Capítulo 419 Nunca te dejes llevar

Cuando la mujer vio que las dos seguían colgadas, apareció un brillo asesino en sus ojos y se abalanzó sobre ellas, las atacó con su cuchillo. Queta y Marina estaban demasiado concentradas en no caerse y no se habían dado cuenta del peligro inminente, pero Marco, en cambio, se dio cuenta. Sus ojos se abrieron de par en par con miedo y se lanzó hacia ella, ignorando su pierna herida y a continuación, le lanzó su muleta. La mujer había centrado su atención en Marina, por lo que no se había percatado en absoluto de las acciones de Marco.