Caridee estaba llena de ansiedad, al borde de las lágrimas. Extendió la mano y empujó con fuerza a Veikko varias veces, pero él permaneció impasible. Arrebató la daga de las manos del agente especial, reprimiendo su angustia mientras la clavaba con fuerza en el cuerpo de Veikko.
Normalmente, una persona en coma se sobresaltaba al ser sometida a un dolor intenso. Sin embargo, cuando clavó la daga, Veikko no mostró ninguna reacción. Al haber estudiado hipnosis, tenía un conocimiento más profundo de la conciencia humana.
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