Los ojos de Lionel se ensombrecieron y tenía una expresión de pena en la cara:
«Sólo han pasado unos días desde que dejé de supervisarle. Sin embargo, ya ha acabado en un estado tan lamentable ¿eh? No puedo creer que esté pensando en vender la empresa. Dieciocho billones. Vendió sus acciones por un total de dieciocho billones. ¿Se le acabó el dinero tan pronto? Incluso si hubiera quemado los billetes uno por uno, podría haber gastado años en hacer eso. Ahora, ni siquiera ha pasado un mes, y sin embargo ha malgastado ya todo el dinero.»
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