—¿Qué más da si no lo aceptan? No puedo permitir que mi hijo llame «papá» a otro hombre, ¿verdad? No quiero escuchar tu sermón. Ya que está embarazada de mi hijo, tiene que volver conmigo a la casa Shurmer.
Bailey enarcó las cejas como respuesta y esbozó una sonrisa divertida.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread