Capítulo 482 Estoy más disgustada que antes
Muchos jóvenes que estaban en el gimnasio de escalada reconocieron a Lina. Luego miraron a la persona que estaba a su lado, y aunque no podían ver el rostro de Adán con claridad, pudieron adivinarlo porque Lina lo abrazaba con fuerza. En ese momento, estaban gritando mientras les tomaban fotos. Nunca hubiera esperado que algo así sucediera. En ese momento, escondió su rostro en el abrazo de Adán y susurró:
—¡Date prisa y bájame!
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